1. Seguridad. Es
muy importante este tema. Las playas escondidas, donde no hay ningún servicio
(restaurantes, hoteles, etc.) parecen ideales para acampar, pero no son
recomendables si es un grupo pequeño. Mientras más solitarias sean las
playas, prefiero no acampar allí. Es mejor buscar una playa donde se
encuentren restaurantes o algún negocio cerca.
2. Equipo necesario. Además
de la carpa y la bolsa de dormir, el equipo adecuado va depender del nivel de
comodidad que deseen tener en la playa. Pueden conseguirlo en tiendas
especializadas o buscar un mejor precio en internet, en ventas online en Perú.
Sin duda alguna, les recomiendo una sombrilla, un aislante o colchoneta, una
parrilla, una mesita playera portátil, un cooler (siempre debe estar en la
sombra), y una linterna. Si les gusta hacer fogata, llevar leña.
3. Permisos. De acuerdo a
la ley peruana la playa es de todos y nadie puede adueñarse de una parte del
litoral y no dejarte acampar. Lamentablemente, la ley no se cumple
como se debe, y en varias playas he visto que clubes o asociaciones privadas se
adueñan de una parte. En la playa Gramita, nos pasó que el hotel las Aldas, no
nos dejó acampar en una zona porque según ellos había un “previo
acuerdo”. Hablamos con ellos pero fue inútil y para no discutir más
decidimos ubicarnos en otra zona de la playa. Te recomendamos la agencia de
viajes Meltourperu aquí.
4. Baño. Lo mejor es
alquilar baño en los restaurantes que estén cerca de la zona de
campamento. Muchas veces, la mayoría usa las zonas rocosas y pequeñas
cuevas de las playas, pero por favor no dejen absolutamente nada de basura.
Lamentablemente es muy común ver los papeles higiénicos en estas zonas,
que corresponden a los campistas irresponsables que por flojera dejan los
papeles y no tienen una bolsa para ese tipo de basura. No podemos seguir
ensuciando las playas de esa forma.
5. Ubicar la carpa no tan cerca de
la orilla. En la noche el mar suele tener más fuerza y el agua llega a
más área de la playa. Chequear que la arena esté bien seca y por si a caso
pueden armar una zanja en frente de las carpas. De esta forma previenen que se
inunde su campamento si el mar lo alcanza.